La sociedad argentina no termina de festejar y conmemorar al padre de la democracia, en el nombre de Raúl Alfonsín, que ya estamos dándole otro golpe a la democracia con las listas testimoniales.
¿Qué son las listas testimoniales?
Ni más ni menos que un engaño al pueblo que cree votar a un determinado personaje de la vida política argentina, pero que nunca asumirá la posición a la cual se postula. Por ejemplo si Daniel Scioli se postula a legislador, este nunca asumirá ya que es el gobernador de la provincia de Buenos Aires y no renunciará para dejar el cargo. Aún si renunciara y asumiera, tampoco dejaría de ser un golpe a la democracia, ya que no cumpliría el mandato para el cual el pueblo en mayoría lo votó.
¿Es ilegal?
No, pero es otro cimiento que se desmorona en la débil democracia argentina. No siempre lo legal es correcto, y este es un caso típico.
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