La Argentina no tiene futuro

Cuando comencé a escribir este blog pensé que podía aportar algún granito de arena para cambiar esta triste realidad que vive la Argentina, con la intención de dejar un mejor país a mis hijos, familiares, amigos, y todos los que sean honestos y tengan buena voluntad.

Hoy la desilusión es completa. Argentina no tiene futuro.

Una Argentina dirigida por los Kirchner, Moyano, Delía, Moreno, Sindicatos descontrolados, Piqueteros de profesión, Violencia desenfrenada, Pobreza extrema, Oposición inexistente, Políticos corruptos, Justicia de dudosa imparcialidad, Educación pobrísima, muestra que no tenemos futuro.

Vivimos en una Argentina en la cual te matan por robarte un celular, donde fumarte un porro no es delito, donde si sos amigo de los K te hacés rico, donde no dejarte circular por calles y rutas está permitido y encima la policía cuida a los que las cortan.

Vivimos en una Argentina que te saca hasta la última gota de esperanza, donde se publicita libremente que te podés jubilar sin trabajar, donde los chicos cada vez tienen menos días de clases. Estamos transformando a la Argentina en una fabrica de burritos, vagos, ladrones, drogadictos y delicuentes.

Vivimos en una Argentina donde vamos a perder la independencia informativa de los medios y veremos solo las noticias que le gusten al gobierno de turno.

Vivimos en una Argentina no con democracia, sino con dictadura que se tilda de democracia, pero tiene muy poco. Ver un partido de fútbol por el canal estatal, recuerda una transmisión del fútbol en la peor época del gobierno militar de los 70, donde decían en los avisos comerciales "los argentinos somos derechos y humanos" y tantas burradas más.

Vivimos en una Argentina donde nos han robado hasta nuestra futura jubilación con la estatización de las AFJP. Donde todo el dinero entró a una bolsa de gatos para gastar en lo que le plazca a la reina Cristina.

Si tenemos algo de suerte, algunos podremos intentar ingresar o mantenerse en la Argentina en la cual le va relativamente bien economicamente al que trabaja, que podemos educar a nuestros hijos, que podemos intentar vivir todo lo digno que sea posible, pero nada más.

Mi intención es mantener la cultura de trabajo, reforzar la educación y los valores, intentar dentro de este país desenfrenado, mantener la calma y progresar trabajando. Reforzar el mensaje a nuestros hijos, familiares y amigos que el trabajo dignifica, y que debemos evitar vivir sin trabajar con los subsidios compra-votos.

No bajo los brazos en seguir intentando un cambio, pero esta vez, ya tengo muy pocas esperanzas. Una lastima.